“Claro de Bosque” es un proyecto que se refiere al arte como un espacio de encuentro, de conocimiento, un lugar en el que en medio de la sombra hay un rayo de luz que da vida al camino y da esperanza. Alude a la idea Heideggeriana del arte como develador de verdad que crea un horizonte.

 

Las piezas que componen este proyecto aluden al juego y crean en cierto sentido un paralelo con el arte, ambos vistos como claros de bosque.

 

Creo en la obra de arte como

un espacio para el asombro, un lugar de reflexión, de belleza y deleite, que nos devuelve la esperanza.

 

A través de la obra, igual que en el juego y de la misma manera que en la vida, se establecen categorías, reglas, sin salidas, soluciones; y el azar se convierte en un camino más para recorrer y para descubrirnos a nosotros mismos.

 

Me interesa ver a las personas interactuando con la obra, descubriéndose frente a ésta.

Completándola y dejando que termine de ser en el tiempo.

La obra como juegos que se abren, que cuentan historias y nos transportan a otros mundos y a soñar.

La obra para jugar, para usar y conservar en ella pedazos de nosotros. Una obra que dé cuenta de otro mundo autónomo como el del juego, de desplazamientos, de señales, de resistencia.

El juego, como la obra, funda un mundo,

nos centra y nos concentra, nos hace ser creativos, emociona y hace soñar. También nos reconcilia con la existencia.

Hace sentir que no estamos sólos, que estamos en el mundo con otros y que todos somos lo mismo.

La obra, como el juego, nos despierta y nos introduce en un espacio de meditación y de conciencia. Nos hace detener y contemplar.

 

Claro de bosque

Museo de Arte

Universidad Nacional de Colombia

Año 2010

María Fernanda Zuluaga

mf.zuluaga20@gmail.com